La revista británica asegura que España tiene un riesgo del 30% sufrir una crisis económica grave. El editor jefe de la publicación, Dan O’Brien, rebaja el triunfalismo de Zapatero y desconfía de sus previsiones.
Gran expectación en un conocido hotel madrileño ante la conferencia del presidente Zapatero organizada en la mañana de este martes por The Economist. Había casi tantos medios acreditados como VIP del mundo del ‘parné’. En este entorno, Zapatero aprovechó para lucir palmito y presumir de la buena marcha de la economía. El resumen: España no es que vaya bien, es que va mejor que mejor.
Así, ZP concluye con lo siguiente: “España ha sido el país que mejor ha aprovechado el último cuarto de siglo y probablemente será el que mejor aproveche la próxima década”. O sea, ‘sobrao’. Y claro, tanta prepotencia no ha gustado a los británicos. “Ya veremos si se cumplen las previsiones del Presidente del Gobierno”, ha señalado Nenad Pacek, director de EMEA and Global Practice Leader.
Pero lo fuerte vino con el editor jefe de la publicación, Dan O´Brien, que se ha mostrado muy crítico con la realidad económica española. Reconoce el “milagro” laboral, pero recuerda que España presenta de manera recurrente una inflación superior a la media comunitaria y que nuestra productividad es permanentemente menor que la de los países de nuestro entorno. Además, O´Brien recuerda que el endeudamiento de las familias es el mayor de UE y que por lo tanto, los españoles somos más sensibles a una subida de tipos de interés.
Por si fuera poco, O´Brien apunta al riesgo de que una economía seriamente dependiente de la evolución de la construcción, que explica gran parte de nuestro crecimiento económico y del ‘milagro’ laboral. Y más: el editor jefe del Economist plantea también los riesgos políticos. En primer lugar, el riesgo de la polarización política, “muy superior a la de los países del entorno”. Además, el tema territorial, abierto en canal desde la aprobación del Estatut catalán, como incipiente Constitución catalana. “Habrá que analizar las implicaciones de estas reformas y rechazarlas o aceptarlas”, señala O´Brien. Y por supuesto, ETA, que “divide a los dos principales partidos”.
Más, frente a la inmigración “complementaria y no sustitutiva” de la que habla Zapatero, O’Brien apunta el riesgo de que se puedan producir brotes de xenofobia como se han producido en Holanda. “No hay duda de los beneficios económicos de la inmigración, pero existen riesgos que conviene contemplar”.
¿Cuál es la previsión para el futuro inmediato de la economía española teniendo en cuenta que el propio Solbes advierte del riesgo de ‘pequeño bache’ para el 2007?, preguntamos. Desde luego, O’Brien descarta que el crecimiento económico fuera superior al 3% como prevé Zapatero en los próximos años. En opinión del Economist será mucho más suave. Y además, advierte que existe un 30% de riesgo de que haya una corrección severa, debido al fuerte endeudamiento exterior. Agárrense los machos.
Así, ZP concluye con lo siguiente: “España ha sido el país que mejor ha aprovechado el último cuarto de siglo y probablemente será el que mejor aproveche la próxima década”. O sea, ‘sobrao’. Y claro, tanta prepotencia no ha gustado a los británicos. “Ya veremos si se cumplen las previsiones del Presidente del Gobierno”, ha señalado Nenad Pacek, director de EMEA and Global Practice Leader.
Pero lo fuerte vino con el editor jefe de la publicación, Dan O´Brien, que se ha mostrado muy crítico con la realidad económica española. Reconoce el “milagro” laboral, pero recuerda que España presenta de manera recurrente una inflación superior a la media comunitaria y que nuestra productividad es permanentemente menor que la de los países de nuestro entorno. Además, O´Brien recuerda que el endeudamiento de las familias es el mayor de UE y que por lo tanto, los españoles somos más sensibles a una subida de tipos de interés.
Por si fuera poco, O´Brien apunta al riesgo de que una economía seriamente dependiente de la evolución de la construcción, que explica gran parte de nuestro crecimiento económico y del ‘milagro’ laboral. Y más: el editor jefe del Economist plantea también los riesgos políticos. En primer lugar, el riesgo de la polarización política, “muy superior a la de los países del entorno”. Además, el tema territorial, abierto en canal desde la aprobación del Estatut catalán, como incipiente Constitución catalana. “Habrá que analizar las implicaciones de estas reformas y rechazarlas o aceptarlas”, señala O´Brien. Y por supuesto, ETA, que “divide a los dos principales partidos”.
Más, frente a la inmigración “complementaria y no sustitutiva” de la que habla Zapatero, O’Brien apunta el riesgo de que se puedan producir brotes de xenofobia como se han producido en Holanda. “No hay duda de los beneficios económicos de la inmigración, pero existen riesgos que conviene contemplar”.
¿Cuál es la previsión para el futuro inmediato de la economía española teniendo en cuenta que el propio Solbes advierte del riesgo de ‘pequeño bache’ para el 2007?, preguntamos. Desde luego, O’Brien descarta que el crecimiento económico fuera superior al 3% como prevé Zapatero en los próximos años. En opinión del Economist será mucho más suave. Y además, advierte que existe un 30% de riesgo de que haya una corrección severa, debido al fuerte endeudamiento exterior. Agárrense los machos.