Dos plantas con «50 habitaciones dobles» en cada una, que den servicio a unas 200 personas. Ése es el planteamiento inicial que refleja el anteproyecto del nuevo geriátrico de Las Vegas que pretende poner en marcha el concejal de Urbanismo, Luis Solares, en el entorno de las calles La Estebanina y Rubén Darío. Una instalación que se construirá bajo la fórmula de la concesión de obra pública adjudicando la gestión a la misma empresa que se encargue de ponerla en pie.
«Es una instalación muy necesaria. En Asturias y en Corvera hay mucha población envejecida que necesita de cuidados durante todo el día y que son difíciles de ofrecer por parte de sus familias», señaló el concejal de Urbanismo.
El proyecto cuenta también con dos espacios de recreo en el exterior del edificio, uno de uso público y otro dedicado al disfrute de los residentes. Además, el edificio contaría con varios comedores, salas de estar, zonas de juegos, capilla y recibidor. Uno de los detalles más singulares está en su cubierta. La mitad de la misma estará dedicada a terraza, mientras que la otra mitad albergará diferentes servicios. Según explicó Solares, «el planteamiento es que funcione como residencia permanente, pero también puede hacerlo como centro social».
El anteproyecto del nuevo edificio cuenta con dos plantas subterráneas en las que se albergaría un aparcamiento con capacidad para unos 160 vehículos. «Esta instalación costaría unos seis millones de euros. Nuestra idea es dar una concesión a una empresa privada por el máximo tiempo que permita la Ley. En cuanto a los aparcamientos, aún no sabemos el tipo de gestión que aplicaremos», explicó Luis Solares.
Convenio urbanístico
Para conseguir poner en marcha este nuevo geriátrico, el Ayuntamiento debe hacerse primero con la titularidad de los terrenos, una de las últimas parcelas sin edificar que quedan en el centro de Las Vegas. Luis Solares ha iniciado ya conversaciones con la propiedad después de que se rechazase el convenio urbanístico que habían negociado PSOE e IU en su anterior etapa al frente del Gobierno local.
El Ayuntamiento está a la espera de recibir una contraoferta de la propiedad para continuar las negociaciones. En caso de que éstas no llegasen a fructificar, la opción sería la de cambiar la calificación urbanística de la finca para que pase a ser «suelo dotacional de interés público».
En ese momento, se iniciarían los trámites para expropiar la parcela. «Tenemos tiempo para negociar, pero en un par de meses esperamos llevar a aprobación inicial el Plan General de Ordenación Urbana y ahí se introducirían las modificaciones. Luego vendría la expropiación», explicó el concejal de Urbanismo.
«Es una instalación muy necesaria. En Asturias y en Corvera hay mucha población envejecida que necesita de cuidados durante todo el día y que son difíciles de ofrecer por parte de sus familias», señaló el concejal de Urbanismo.
El proyecto cuenta también con dos espacios de recreo en el exterior del edificio, uno de uso público y otro dedicado al disfrute de los residentes. Además, el edificio contaría con varios comedores, salas de estar, zonas de juegos, capilla y recibidor. Uno de los detalles más singulares está en su cubierta. La mitad de la misma estará dedicada a terraza, mientras que la otra mitad albergará diferentes servicios. Según explicó Solares, «el planteamiento es que funcione como residencia permanente, pero también puede hacerlo como centro social».
El anteproyecto del nuevo edificio cuenta con dos plantas subterráneas en las que se albergaría un aparcamiento con capacidad para unos 160 vehículos. «Esta instalación costaría unos seis millones de euros. Nuestra idea es dar una concesión a una empresa privada por el máximo tiempo que permita la Ley. En cuanto a los aparcamientos, aún no sabemos el tipo de gestión que aplicaremos», explicó Luis Solares.
Convenio urbanístico
Para conseguir poner en marcha este nuevo geriátrico, el Ayuntamiento debe hacerse primero con la titularidad de los terrenos, una de las últimas parcelas sin edificar que quedan en el centro de Las Vegas. Luis Solares ha iniciado ya conversaciones con la propiedad después de que se rechazase el convenio urbanístico que habían negociado PSOE e IU en su anterior etapa al frente del Gobierno local.
El Ayuntamiento está a la espera de recibir una contraoferta de la propiedad para continuar las negociaciones. En caso de que éstas no llegasen a fructificar, la opción sería la de cambiar la calificación urbanística de la finca para que pase a ser «suelo dotacional de interés público».
En ese momento, se iniciarían los trámites para expropiar la parcela. «Tenemos tiempo para negociar, pero en un par de meses esperamos llevar a aprobación inicial el Plan General de Ordenación Urbana y ahí se introducirían las modificaciones. Luego vendría la expropiación», explicó el concejal de Urbanismo.